Se convirtió en la primera saltadora de triple en la historia en ganar tres títulos consecutivos en mundiales
CARACAS.- El prolongado descanso de Yulimar Rojas en nada melló su vínculo indestructible con el primer lugar en el salto triple. Desde agosto del año pasado, tras ganar el oro en el Mundial de Atletismo al aire libre en Londres, la caraqueña hizo una larga pausa, hasta su reaparición de ayer en la cita universal bajo techo de Birminghan, Inglaterra, donde marcó otro hito con su segundo oro consecutivo y el tercero al hilo. en mundiales de este deporte.
Yulimar se convirtió en la segunda triplista, después de la rusa Tatiana Lebedeva, en ganar dos mundiales bajo techo consecutivos y la primera en la historia en ganar tres mundiales de salto triple (pista cubierta y aire libre) al hilo.
En estos siete meses de sosiego, Yulimar se repuso de la lesión en el tobillo que le impidió brillar en la final de la Liga Mundial de Diamante, y aprovechó el tiempo para seguir refinando su técnica. La diferencia entre la novata que sorprendió al mundo con su primer título en Portland 2016, cometiendo falta tras falta en la tabla batida, es del cielo a la tierra. Hace dos años se tituló con un único salto válido de 14,41 m; el sábado, en cambio, solo cometió un error en el sexto salto, cuando ya tenía la tercera medalla dorada consecutiva en su morral de competencia.
Su comienzo fue lento con tres saltos de clasificación de 14.24 metros, 14.04 y 14.27 que la ubicaron provisionalmente en el segundo lugar, detrás de la jamaiquina Kimberly Williams (14.37, 14.41 y 14.48). Pero en los tres saltos de mejora la caraqueña corrigió el impulso de sus batidas, sacó ventaja como siempre de las zancadas profundas de sus piernas y alargó la extensión de la caída para responder con 14,34 y el decisivo 14,63, el mejor registro del año en el triple para consagrarse de nuevo.
“Es un gran logro para mi país, espero haberles dado un poco de alegría y hayan disfrutado viéndolo”, afirmó tras celebrar el triunfo con su entrenador, el cubano Iván Pedroso. “Fue una prueba difícil y me ha dado una gran inspiración para el verano”, añadió la medallista plateada en Río 2016.