Carlos Gómez asegura que fueron víctimas de maltrato y robo, a pesar de haber llegado a EE. UU. con la esperanza de un futuro mejor.
El martes 28 de enero, llegó al Aeropuerto Internacional El Dorado el primer grupo de colombianos deportados desde Estados Unidos, como parte de las políticas migratorias impulsadas por la nueva administración de Donald Trump, quien asumió su segundo mandato el 20 de enero de 2025. Entre los deportados, se encontraba Carlos Gómez, quien relató su experiencia durante la travesía y el trato recibido en los centros migratorios de Estados Unidos.
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Deportados hablan de un trato severo y humillante en los centros migratorios
En diálogo con La FM de RCN Radio, Gómez expresó cómo vivió el proceso, que incluyó el maltrato hacia su hijo menor de edad. “Lo esposaron, le pusieron unos grilletes desde que salimos de San Diego hasta el avión Hércules”, comentó Gómez, visiblemente afectado por la situación. El colombiano de 17 años, quien viajaba con su padre, también fue víctima de un trato severo. “Venía esposado, tenía los grilletes apretados, le dolía y lloraba”, añadió Gómez.
El trato en los centros migratorios también fue motivo de preocupación para Gómez, quien aseguró que la comida era arrojada al suelo, y en San Diego, el trato fue especialmente humillante: “Nos tiraban la comida en el piso, no nos dejaban hablar, nos mandaban a quedarnos en una esquina, feo”, relató el deportado. Sin embargo, en Texas, la situación fue algo más favorable. “Nos dieron baño, ropa limpia, y aunque nos robaron nuestras pertenencias, el trato fue mejor”, explicó.